miércoles, 30 de julio de 2014

“Tomates en el balcón” colabora con La Campaña Ropa Limpia


 La Campaña Ropa Limpia (CRL) es una red internacional de ONGs y de personas consumidoras. CRL está presente en 14 países europeos y colabora con Más de 250 organizaciones de trabajadores de todo el mundo con los siguientes objetivos:

- Mejorar las condiciones laborales en la industria textil y de material deportivo.

- Conseguir que las condiciones de trabajo sean equivalentes a las establecidas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT)

- Minimizar El impacto de la producción textil sobre el medio ambiente.

Con respecto a los dos primeros puntos La Campaña Ropa Limpia utiliza sus propios códigos de conducta como campaña Ante los retos que plantea el sistema de comercio internacional, la Campaña Ropa Limpia ha desarrollado una seria de propuestas para las empresas que se recogen en un documento específico, Full Package Approach to Labour Codes of Conduct disponible en www.cleanclothes.org disponible en varios idiomas que describe los pasos que una compañía que quiera desarrollar una estrategia de responsabilidad creíble debería dar: 

- Adoptar un código de conducta exhaustivo, creíble y transparente
- Implementar el código de conducta
- Establecer canales de participación real de las partes implicadas
- Adopción de un enfoque positivo hacia la libertad de asociación


 Y esto ¿Por qué? Porque se ha comprobado que muchas empresas utilizan su propio “código de conducta”, un documento que la empresa aprueba de forma unilateral y de manera voluntaria. No nace pues de la negociación colectiva y no hay una legislación u organismo internacional que obligue a disponer de este código ni a cumplirlo.


La Campaña Ropa Limpia cree que los gobiernos tienen un papel muy importante a la hora de asegurarse de que los estándares laborales se cumplen (en muchos países en los que se producen prendas de vestir, la legislación es óptima, pero el cumplimiento de las leyes no lo es). Por este motivo, la CRL ejerce presión de forma activa para que se establezca una legislación que fuerce a los gobiernos a convertirse en consumidores éticos.

La CRL reconoce que los estados se encuentran sometidos a mucha presión (por ejemplo, por parte del Banco Mundial y el FMI) para crear un clima (bajada de impuestos, limitación de los derechos de los sindicatos, bajadas salariales) que sea atractivo para los inversores extranjeros, pero esto no justifica el que ignoren sus responsabilidades para con su ciudadanía.


Para minimizar el impacto de la producción textil sobre el medio ambiente, es necesario sensibilizar a la población por un consumo responsable. Varias preguntas nos podemos hacer:
¿Qué necesito? A menudo compramos “alguna cosa” para liberar tensiones o “ansiedades” lo hacemos de manera compulsiva. ¡¡Ojo!! Hay que compara comprar por una necesidad o un deseo

¿Dónde compro?  En nuestras ciudades encontramos numerosas tiendas de ropa, con una oferta muy abundante. La gran cantidad de ropa nueva que se produce implica una explosión muy importante de recursos naturales, que en su mayoría no se recupera mediante el reciclaje. Si queremos ropa, antes de compara, preguntarnos a qué tipo de comercio queremos favorecer.

¿Qué tipo de tejidos y qué calidad estoy comprando?  Hace unos años, solo había en el mercado fibras textiles naturales. Vestíamos ropas de fibras como el algodón, el lino, la lana o la seda. Generalmente, la gente sabía distinguir, por el tacto o por una simple inspección visual, de qué tipo de fibra se trataba. Hoy en día, además de las fibras naturales, se utilizan cada vez más las fibras artificiales, que se obtienen mediante síntesis química, y las fibras sintéticas, que se obtienen a partir de derivados del petróleo.

Sobre esto último os presentamos un proyecto de creación en de verdadera conciencia ecológica. El proyecto de Ilana Efrati


Ilana Efrati utiliza pigmentos naturales que encuentra en las plantas locales que la rodean y a continuación utiliza esos tintes en combinación con fibras naturales como la seda, el lino y el algodón. A través de este proceso se las arregla para capturar en sus telas los colores de las estaciones de una forma totalmente natural, sin ningún tipo de productos químicos de síntesis. La técnica viene a ser como la japonesa  Shibori ¿Recuerdas la técnica de teñir?

Estas telas pararen las huellas dactilares metafóricas de cada planta. Sus prendas irradian pura calma, elegancia terrenal, ropa sostenible. www.ilanaefrati.com




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